EDICIONES AVERSIVAS

EDICIONES AVERSIVAS

miércoles, 15 de mayo de 2013

CRISIS ECONOMICA Y GESTIÓN DEL DESASTRE


-La propaganda mediática del sistema de dominación nos bombardea cada día y a cada instante con la llamada crisis económica. Nos ofrecen pinceladas anacrónicas y vagas de su “origen”, mientras que nos muestran a lxs politicxs en luchas encarnizadas por buscar la mejor solución que nos muestre el camino de vuelta hacia el crecimiento y el desarrollo, que para ellxs es ilimitado, aunque conocemos que los recursos son finitos y el planeta tiene un límite.

Por nuestro lado, sabemos que las crisis son un factor intrínseco al sistema capitalista, y que con ellas se suele dar otra vuelta de tuerca a las cadenas que nos oprimen y esclavizan. En este breve texto vamos a intentar realizar un escueto análisis sobre sus causas internas y externas y las consecuencias que nos depararán en el presente y en el futuro, pero no solo la crisis económica, sino nuestro modo de vida impuesto y el sistema productivo que conlleva: Deshumanización y destrucción natural. No sólo nos referimos al estilo de vida despilfarrador de lxs ciudadanxs o de las clases sociales que pueden acceder a ellos, sino al conglomerado tecnológico e industrial necesario para saquear esos recursos y ponerlos a disposición del Poder político-económico de dominación.

Como bien sabemos todxs, el objetivo de cualquier empresa capitalista es siempre el incremento del beneficio monetario, conseguir el máximo beneficio invirtiendo lo mínimo posible para su realización, esa es su verdadera lógica por mucho que nos pregonen otras finalidades bienintencionadas. ¿Y cómo conseguir muchos beneficios? Pues, por ejemplo, vendiéndose por medio de la publicidad para su consumo masivo, explotando a lxs trabajadorxs, o inculcando necesidades que se convertirán en indispensables para la vida civilizada. Uno de los motores imprescindibles de los Estados capitalistas es el consumo, en ello se basan para seguir “creciendo”, para demostrar su opulencia y su riqueza. Se ha constatado que las sociedades más ricas son las que mayor cantidad de basuras generan, es decir, un país es más rico cuanta más basura tiene, EE.UU sería el ejemplo más claro, tanto en contaminación, desechos que produce y en energía que consume. No es ninguna broma. El consumo de necesidades fabricadas por la ingeniería social prima sobre las necesidades reales de lxs individuxs. Las mercancías priman sobre las personas, de eso no nos quepa dudas, pero el Dios dinero más aún, y en toda empresa es su finalidad.


.Crisis a nivel internacional.


Para realizar un análisis de la actual Crisis tenemos que examinar tanto factores internos como externos, pues la economía está mundializada e interconexionada. Lo que podríamos llamar origen a nivel internacional comenzó en Estados Unidos con la aparición de las llamadas hipotecas basura, estas se empiezan a conceder a personas con condiciones económicas difíciles para poder devolverlas, por ello se denominan productos financieros de alto riesgo. Por lo que el sistema bancario podría “transformar esas hipotecas en productos derivados en los que el riesgo de esos productos disminuía. Los unían a otros productos financieros de menos riesgo, creando un nuevo producto, que luego ponían a la venta en los mercados internacionales”1. La especulación reinante no tenia limites, pues gracias a la Ley Glass-Steagal las empresas manipulaban sus cuentas “exagerando beneficios y escondiendo perdidas, atraían nuevas inversiones que se volvían a utilizar en inversiones meramente especulativas sin base real que explicase la alta rentabilidad”2. Después de vender todas esas hipotecas basura, subieron los tipos de interés y bajaron los precios de la vivienda, lo que acarreo que esas personas no pudieran terminar de pagar sus hipotecas y fueran desahuciadas. Por lo que se redujo la confianza financiera por los impagos masivos de estos productos y algunas entidades financieras quebraron, además se empezaron a escatimar préstamos e hipotecas por lo que la financiación quedo mermada a personas, empresas y bancos. También a nivel internacional influyó bastante la subida de los precios del petróleo y por tanto también la de los alimentos de todo el mundo. La subida del precio del petróleo viene generada por el estancamiento de la producción y el aumento de demanda en otros países como China o India. Hemos llegado al cenit o pico de la producción de petróleo y el aumento del consumo del combustible fósil no es muy halagüeño para el funcionamiento de la sociedad tecno-industrial y del capitalismo, pues las reservas cada vez están más mermadas y comienza a elevarse su precio lo que tendrá una fuerte repercusión, pero eso es algo de lo que hablaremos más tarde.




A nivel internacional no nos podemos olvidar de un aspecto fundamental de la crisis económica occidental como es el crecimiento de las potencias llamadas emergentes como China, India o Brasil, gigantes hipermasificados que se han subido al carro del capitalismo voraz y del despilfarro consumista. En estas potencias emergentes la mano de obra es más rentable para las empresas multinacionales y muchas se van allí a hacer sus negocios ya que pagan menos impuestos a los respectivos Estados y lxs trabajadorxs suelen tener menos derechos laborales y sindicales consiguiendo así una mano de obra más esclavizada y laboriosa. Es por eso que lxs politicxs y economistas nos hablen tanto de flexibilidad y competitividad, para ir aplicándonos el cuento de que tenemos que ser competitivos en la economía globalizada lo que implicaría reformas laborales agresivas, recorte de derechos, privatizaciones…para conseguir una mano de obra a la altura de las expectativas empresariales, es decir, más esclava y sumisa, sin voz y fragmentada más aun. La consigna es esta: O somos buenos esclavos asalariados, competitivos, flexibles y precarios o nos quedamos en el paro y los años de bonanza no volverán (aunque tal vez nunca vuelvan).


.Crisis en el Estado Español.


En el Estado Español, el funcionamiento ha sido similar, debido a la burbuja inmobiliaria que terminó explotando en el 2008, el sector de la construcción y el inmobiliario crecieron ostentosamente aunque también podríamos citar al turismo, ya que está ligado al de la construcción. El Estado Español depende mucho de las importaciones extranjeras ya que es un país que se basa en el sector terciario (economía tercializada) pues al entrar en la U.E se redujo el peso de la industria y de la agricultura, y sus restos se maquinizaron o empezaron a tener cada vez mayor carga laboral. También depende de la importación productos de alta tecnología y diversas energías fósiles de otros países. Ante estos parámetros y con el estallido de la burbuja inmobiliaria comenzaron a endeudarse las cajas y los bancos entrando algunos en bancarrota, a subir el paro (sobre todo el derivado de la construcción), disminución de la financiación empresarial, desahucios, privatizaciones, recortes sociales y del llamado Estado del Bienestar. El consumo se reduce por el debilitamiento económico de la clase media y las movilizaciones sociales aumentan sin ser un verdadero peligro al ser tan lúdicas y festivas. Se comienzan a perder derechos sociales y laborales con las sucesivas reformas laborales del PSOE y del PP; al perder derechos y privilegios económicos lxs trabajadorxs son un reclamo competitivo para las empresas que se quieran instaurar en el territorio del Estado Español, pues así tendrán trabajadorxs más similares a lo que buscan en otros países del llamado tercer mundo para su política del máximo beneficio. Es decir, que nos intentaremos poner a la altura (en lo económico y laboral) de las potencias emergentes o del tercer mundo en lo que concierne a la producción y sus demandas esclavistas. Muchos pensaron en devaluar la moneda como se hacía antes en periodos de crisis, pero ahora eso con el euro no se puede hacer, así que es mejor devaluar a lxs trabajadorxs para matar a dos pájaros de un tiro y que sus beneficios no se vean mermados drásticamente.

Por lo que observamos, todo esto es otra vuelta de tuerca del capitalismo e inherente a él. Con el espolio que se ha llevado a cabo a las clases trabajadoras con la escusa de la crisis, han acabado inyectando dinero de los fondos europeos al sistema financiero y bancario, ha conseguido hacer una brecha más grande entre ricos y pobres y ha propagado un estado de confusión, miedo y apatía a las masas, que sólo reclaman volver al estadio de las vacas gordas, el del derroche y la opulencia, el del consumismo frenético bajo la seguridad del Estado del Bienestar protector.

Muchos proclaman que tiene que volver el Estado férreo y duro frente a las extravagancias del Capital y de los Mercados, pero qué cabe decir sino que la relación de Estado-Capital es muy estrecha, el uno sin el otro prácticamente no podrían existir. Ante esta situación de amor perpetuo, los dirigentes mueven sus tentáculos de poder y muchxs de ellxs los posan sobre las empresas del IBEX-35 y se hacen consejerxs o adquieren un puesto, como Aznar (Endesa) o González (Gas Natural Fenosa), cobrando verdaderos pastones, y como no, de empresas energéticas…

Otro de los temas que están en carne viva en los medios de formación de masas (Mass media) es el tema de la corrupción por parte de la clase dirigente y poderosa. Nos hablan de “malas prácticas”, en vez de decir robar, nos hablan de políticxs y autoridades “buenxs” y “malxs”, nos hablan de “tomar medidas” y de “crear leyes” pero de lo que no nos hablan es que política profesional y corrupción van de la mano. Lxs políticxs son la llave maestra que tienen empresarixs, familiares y amigxs para abrir el cofre del tesoro público y afincarse en sus instalaciones. Son la pieza legítima para crear leyes que favorezcan sus intereses y los de su clase dominante. No nos ilusionemos con una democracia parlamentaria donde no haya ningún tipo de corrupción, el “amiguismo” y el tráfico de influencias siempre estarán presentes, aunque no salgan a la luz. El fraude y la evasión fiscal son otros problemas inevitables del funcionamiento político-económico, quien hace la ley hace la trampa y ellxs se conocen muy bien ese terreno. A muchxs se les vendrá a la cabeza el caso de Islandia y sus ajusticiamientos carcelarios a políticxs y banquerxs corruptos como solución a todos los problemas. Primero no creemos que la cárcel sea solución de nada y segundo en Islandia viven 331000 personas en el Estado español más de 47 millones de habitantes de los cuales 445.568 son políticos…seguro que se tendrían que construir cárceles sólo para políticos que es justo lo contrario de su finalidad, son para los pobres en su mayor medida. Podríamos realizar un estudio más amplio de esta comparación pero por espacio nos es imposible. La clase dirigente buscará siempre velar por sus intereses (y nunca por el bien común de sus ciudadanxs) y no dudarán en llenarse los bolsillos legal o ilegalmente, ya que la vida política no suele ser muy larga para muchxs, vamos, como los futbolistas. El llamado caso Barcenas y la lista de sobresueldos del PP es el mejor ejemplo actual, pero no dudemos ni un segundo que el mundo del Dios dinero los que estén en el poder siempre sacarán una tajada extra. Ya que se habla de mayor control y de tomar medidas para sufragar este problema para que no roben más de la cuenta (ya que nos roban viviendo de nosotrxs) no cambiará nada y seguiremos dominados y explotados.


.Crisis e indignadxs.


La crisis económica ha dado paso a los recortes sociales para disminuir el gasto público, se han disminuido presupuestos en sanidad o educación para ir avanzando en su privatización mientras que el ejército y la iglesia se siguen nutriendo del dinero del contribuyente. Se han ido suprimiendo ayudas y derechos sociales mientras se subía el IVA, bajaban los sueldos, se amnistiaba fiscalmente a los grandes fraudulentos, se reformaba el código penal, se modificaba el sistema de pensiones, la jubilación a los 67 años o se precarizaba más aun el trabajo y la vida de lxs ciudadanxs pidiendo “apretarnos el cinturón” pues para resolver esta situación hay que “hacer esfuerzos”. La respuesta siempre ha sido la reforma y no la ruptura, y ni pensar en la revolución. Se pide la reforma electoral, el control de la banca mediante su nacionalización, transparencia económica de partidos y sindicatos, menos paro y más trabajo y que vengan lxs políticxs “buenxs” para “ponerse al servicio de lxs ciudadanxs”. Sus armas siguen siendo las mismas: movilizaciones y marchas pacifico-festivas, caceroladas, votos, recursos ante los tribunales o democracia participativa digitalizada vía Internet; todo ello evitaría una verdadera ruptura y mantendría la existencia consumista y acomodada de sus ciudadanxs (o eso ellxs quisieran), con su hipotético sueño de regresar a los años de bonanza económica teniendo un trabajo con buen sueldo para no escatimar en nada. Ese es el pensamiento de la gran mayoría de la gente que piensa que cuando pase esta “pasajera” crisis económica volveremos a la “normalidad” primermundista regresando al añorado Estado del Bienestar y al crecimiento y desarrollo ilimitado.


.Crecimiento aberrante y escasez.


Pero esta gran falacia de crecimiento y desarrollo ilimitado inducida por el mito del Progreso en nuestras mentes, nos ha cegado y condicionado de manera sublime haciéndonos participes pasajeros del tren descarriado de la gran megamaquina industrial capitalista. Queremos salir de la crisis, pero ¿hacia dónde? Tanto hablar de crisis económica en medios y en boca de politicxs, se les olvida mentar la crisis ecológica y energética que acabarán teniendo consecuencias mucho más desastrosas de lo que podamos imaginarnos. Los voceros del sistema y su propaganda subjetivizada y condicionadora nos ocultan de una forma u otra sus consecuencias y las tendencias totalizadoras y de dominación que pueden acarrear en un futuro bastante más cercano de lo que creemos. Parece que la tendencia de la gran mayoría social es perpetuar este sistema de dominación donde no existe la Libertad ni la Igualdad, donde reina el Dinero y el Consumo masivo, prefiriendo ser esclavxs atomizadxs para perseguir mercancías innecesarias y sueños que acaban caducando por su insustancialidad.

La verdad es que tal vez toda esta opulencia consumista y despilfarradora esté llegando a su fin, y no será por la conciencia del problema ecológico o existencial sino por el fin de la energía fósil barata y de su paulatino agotamiento. Que el petróleo y otros combustibles fósiles como el gas y el carbón son limitados y finitos que todxs conocemos o deberíamos saber. Nuestro sistema globalizado se basa en el petróleo (sobre todo el barato), la especulación financiera y en las coerciones económico-militares para controlar los recursos energéticos y llevar a cabo sus proyectos totalizadores (además de la servidumbre voluntaria y de la indefensión aprendida). La idea de más crecimiento y de ese desarrollismo frenético está implícita en todos los programas políticos tanto de izquierdas como de derechas, inyectándose en nuestros cerebros y haciéndonos pensar que es el único camino hacia el llamado bienestar y progreso. Este desarrollismo al alza conlleva un consumismo despilfarrador, producción, almacenamiento y quema de basuras, contaminación de agua, tierra y aire, megainfraestructuras, perdida de la biodiversidad, gran consumo energético, militarización y vigilancia de la sociedad, mercantilización de la vida, artificialización del entorno y atomización social para su optimo funcionamiento. Pero ante el agotamiento progresivo de los combustibles fósiles (sin el petróleo este sistema no funcionaría3 las grandes potencias van moviendo fichas en el mapa geopolítico para el control de estos recursos energéticos por lo que en un futuro cercano asistiremos a más guerras y genocidios para el control de estos recursos energéticos, ya lo hemos visto en países como Iraq, Afganistán o recientemente Libia o Malí. El final del petróleo barato ya ha comenzado y lo podemos ver en la subida que ha ido experimentando de hace unos años hasta ahora y se irá incrementando aún más con el paso de los años hasta hacerse inaccesible.

Ya alcanzado el cenit o pico del petróleo y con China, India o Brasil subidos al mismo tren descarriado que Estados Unidos o Europa se irá produciendo una escasez aún más temprana, a pesar de los nuevos yacimientos encontrados, que solo retrasarían el colapso. ¿Qué ocurrirá cuando esta producción/consumo energético empiece a escasear? La respuesta más simple es que nuestras condiciones de vida van a cambiar sustancialmente. Es decir, se reducirá el consumismo hacia la austeridad material al igual que la movilidad motorizada, por lo que el uso del coche quedará restringido prácticamente, las megalópolis serán insostenibles, los alimentos se encarecerán y la agricultura industrial decaerá generando hambrunas, los derechos y servicios del amado Estado de Bienestar serán insignificantes debido a la quiebra de recursos y la dominación política -represora quedará aun más patente. Todo acarreado por los excesos de nuestro tiempo. Como diría José Ardillo en su libro El Salario del Gigante podríamos llegar a un ecofascismo donde el control férreo de los recursos (en especial el agua) y la dominación política implacable estarán a la orden del día.


.Ecocidio y gestión del desastre.


A todo esto también habría que añadir la degradación ambiental4 y la pérdida de biodiversadad mundial unida a la extinción/aniquilación de especies, de los bosques autóctonos y de los mares de todo el globo. El cambio climático ocasionado por nuestro sistema productivo y por nuestra forma de vida impuesta junto con la contaminación química, biológica y radiactiva harán que proliferen las enfermedades de todo tipo y la calidad de vida que tanto nos pregonaban será un una quimera irrealizable. El cáncer5 será algo unido a nuestra existencia y beber agua pura o respirar aire limpio será misión complicada o imposible. Es decir, que los senderos por los que nos lleva el Progreso de los que tanto alardeaba el mundo civilizado nos llevan hacia el abismo. Nuestra especie y las demás especies animales y vegetales están amenazadas por nuestra mera existencia actual. Si colapsa el sistema tecno-industrial por el agotamiento de las reservas mundiales es posible que éste haga todo lo posible por sobrevivir y como bestia herida de muerte intente asestar un último golpe que acabe con todo. Ya se utilizan técnicas tan agresivas como el Fracking o las minas a cielo abierto, los métodos del futuro no serán mejores.

Parece que la gestión del desastre es la tarea encomendada para los próximas décadas. El “desarrollo sostenible” y la sustitución anunciada de las energías fósiles por renovables no son suficientes para que la megamaquina siga su curso demoledor, por lo que se seguirá exprimiendo a la tierra y sus recursos hasta llegar a un “no retorno” producido por unos daños estratosféricos que sentiremos en nosotrxs y todas las especies. Sabemos que con el uso del crudo solo se puede comprender como el comercio mundial de mercancías se multiplicó por 50 en la mitad del siglo pasado y sin una verdadera critica de la de la economía política que abunde el problema de la industrialización y la transformación de la energía no puede abrirse una vía hacia la emancipación6. Es decir, que volver a las épocas de bonanza económica y consumista se ha convertido en una verdadera utopía y en una pesadilla que no queremos volver a recordar ni a vivir. La sobreexplotación y despilfarro que seguimos viviendo actualmente solo ha conseguido construir un mundo autoritario y desigual dirigido por unos pocxs mientras todxs los demás eran esclavos asalariados de las necesidades creadas y difundidas por la sociedad del consumo y la propaganda. No somos los verdaderos dueños de nuestras vidas y nuestra autonomía va decreciendo constantemente, tal vez estemos demasiado ensimismados en nuestras casas conectados a la televisión o a Internet sin tiempo para pensar y para conocernos a nosotrxs mismxs y concebir que hacemos en este mundo y porque son así nuestras vidas. La sociedad opulenta no se puede sostener y por lo tanto tenemos que empezar a construir alternativas y plantearnos otras formas de existencia más libres, autónomas y respetuosas. No existen recetas mágicas ni formulas exactas, el modo de vida rural y autogestionario ya fue desmantelado y será difícil de recuperar, tenemos que construir algo que oponga de llego a los valores del sistema recuperando los saberes ancestrales para saber autogestionarnos y tejer redes horizontales entre nosotrxs para ir contrarrestando la caída. Pueden parecer unos argumentos pesimistas en general pero es que lo son, dado que el panorama tampoco es muy enaltecedor ni perspectivas que se divisan, no queremos caer tampoco en el optimismo rampante que generó el 15M. Siempre hay que llamar a la acción7 y no a la pasividad pero, a no ser que salgamos del individualismo capitalista con el que vivimos aletargados las sociedades están abocadas a la sumisión totalizadora y a la miseria existencial, por ello es momento de despertar.



1Revista de Pensamiento Libertario: Estudios#1 año 2011


2Ibid.


3Los combustibles fósiles como el petróleo mantienen la actual red de transportes que nutre a los supermercados de alimentos además de hacer posible que tengamos luz eléctrica y agua corriente. También proviene del petróleo los fertilizantes, pesticidas, plásticos, ropa, calefacciones etc. Ahora ya se ha gastado el petróleo más fácil de sacar y de más calidad y por lo tanto el que necesita de menos inversión para ser extraído.. Según la TRE (Tasa de Retorno Energético) en los años 30 la tasa de extracción del crudo era de 100 a 1, es decir, por cada barril invertido de petróleo en la extracción se extraían 100, ahora esta relación está de 10 o 5 a 1. Fuente: Un Amargo Declinar. Energía y totalitarismo ecológico. Invierno 2012


4Impactos en el agua potable, tierra fértil, océanos, bosques, diversidad biológica o atmósfera. Toda clase de residuos y vertidos, sólidos, gaseosos y radiactivos altamente tóxicos, contaminantes y peligrosos. Lluvia ácida, deterioro de la capa de ozono, cambio climático (sequías, lluvias torrenciales deshielo de los glaciares, daño a ecosistemas y a la biodiversidad), desaparición de bosques autóctonos, salinización de los suelos, erosión y perdida de fertilidad de estos originado por la agricultura industrializada, desertificación, extinción de especies animales y vegetales...


5Además de infertilidad, malformaciones, alteraciones hormonales, disfunciones inmunológicas, problemas neuronales (autismo, hiperactividad, alzhéimer, párkinson).


6José Ardillo. Utopistas y anarquistas frente al control de la energía.


7Pensamos que es un momento propicio, importante y necesario para la difusión y propaganda de las ideas anarquista y subversivas para crear conciencia y llamar a la acción




ASALARIAXS ENQUISTADXS


-Según las encuestas del C.I.S (Centro de Investigaciones Sociológicas) el primer problema de lxs ciudadanxs es el paro. Nos dicen que ya hay 6 millones de paradxs, es decir, el 26% de la población activa del Estado Español. Parece que no se vislumbra ninguna salida para la creación de empleo y la juventud es de las más afectadas. Ya no se habla de conseguir un buen trabajo con un buen sueldo, ahora sólo se busca conseguir un trabajo, sea cual sea y como sea. Las sucesivas reformas laborales que se han aplicado a la masa trabajadora han precarizando el trabajo aún más y se han disminuido cada vez más los derechos laborales y sindicales. Parece que una receta para esconder el problema del paro ya la han encontrado fijándose en Alemania: los minijobs1 (mini-empleos), trabajos ideales para la juventud desposeída y adiestrada, mal pagados y precarios. La servidumbre voluntaria se ha transformado en servidumbre necesariamente adorada. Si las condiciones de trabajo ya eran bastante penosas anteriormente, tras la crisis y el fantasma del paro amenazando en cada casa, no nos paramos a pensar el tipo de trabajo que nos ofrecen y acatamos cualquier condición por inmunda que sea. La sociedad del consumo se nos escapa de las manos y nos pueden desahuciar de nuestrxs hipotecadas vidas que tantos años de trabajo y esfuerzo nos ha costado y más que nos costaran en el futuro nuestro o en el de nuestrxs hijxs. Como autómatas en la rutina del día a día hemos ido conformando durante años en nuestra existencia sumisión y obediencia a la autoridad, ya que hemos sido aleccionados en la fabrica llamada escuela (publica o privada) o en la universidad. Perdiendo el control de nuestras vidas y adaptándonos a las exigencias del mercado laboral hemos sido desposeídos de nuestra autonomía y nuestra libertad para decidir o crear, convirtiéndonos en un engranaje más de la maquinaria y acometiendo lo que nos ordenaban nuestros superiores o el Mercado.

La irresponsabilidad, la necesidad o la falta de conciencia nos está llevando a contribuir aún más con los trabajos más penosos o destructivos que podamos imaginar. Las megainfraestructuras que necesita la sociedades modernas para seguir creciendo y expandiendirse por el territorio, destruyendo y arrasando con todo lo que se opone a su paso con la excusa de que crean empleo, y que ayudarán a reducir el paro en la comunidad donde se impongan, se han convertido en el futuro y en el sueño de muchxs trabajadorxs y especuladorxs. Proyectos como los trenes de Alta Velocidad, el fracking, la Alta Tensión, la captura y almacenamiento de CO2, las nucleares, los vertederos, los transgenicos, las eólicas, los campos de golf o Eurovegas se cuestionan muy poco entre la población ya que por lo general la gente siempre sale con el argumento de “¡es que crea puestos de trabajo!” y ahí se queda, no se preguntan cuales podrían a ser sus consecuencias en su localidad o a nivel global. Basta con nombrar que con ello se ayudará a familias que están en el paro y que lo están pasando muy mal y se cerrarán bocas. Pero el grado de destrucción medioambiental que crearán, el trabajo precario y temporal que producirán y la repercusión en nuestra salud que generarán parece que dan igual, con el simple hecho de generar un trabajo de mierda todo vale. Otra fuente de trabajo inmundo en la que parece que hay poco paro es para policía o para militar. El sistema represivo siempre busca carnaza para engrosar sus filas y se nutre con esa juventud patriótica y acrítica que celebra entusiasmada los éxitos de la selección y de vez en cuando apalean a algún inmigrante o mendigo, también lxs hay porque no encuentra otra cosa y les da igual servir para lo que sea. En la sociedad del control y la militarización de los territorios siempre habrá un puesto de trabajo esperando al mejor mercenario.

Estamos adaptadxs a una miserable vida de esclavxs, sobornadxs por el caramelito de la sociedad del consumo y sus miles de souvenires industriales; nuestra servidumbre voluntaria se fortalece y vemos necesario el entregar nuestro tiempo vital a lxs dueñxs de los medios de producción y de las empresas. No podemos decir que vivimos en libertad en una sociedad jerárquica y autoritaria donde solo eres una pieza más en su cadena de sumisión y miedo asalariado. El trabajo ha sido totalmente prostituido y vendido al mejor postor, con la división internacional del trabajo y su brutal especialización, la clase trabajadora se ha convertido en una masa amorfa de intereses y necesidades contrapuestas, diluyéndose así su unión y su fuerza, vendida también por los sindicatos de la negociación y del poder. El individualismo consumista y egocéntrico nos ha recluido en nuestras casas buscando la seguridad y conectados con el mundo exterior por medio de un cable que nos modela y condiciona. Por lo que rebelarse contra el trabajo asalariado y por su abolición suena a chiste utópico. La lucha de clases por conquistar los medios de producción y autogestionarlos queda muy lejos aunque en Grecia y en otros lugares ya ha habido alguna experiencia en pleno siglo XXI y sabemos que es posible y realizable pero ¿qué queremos autogestionar?,¿la esclavitud al sistema de producción y consumo?. Necesitamos una verdadera crítica al modelo de vida moderno de consumo-trabajo-ocio para liberarnos de este yugo y poder autogestionar nuestras vidas realmente, tarea ardua y dura pero satisfactoria y libre. La crisis actual es más estructural que pasajera y su gestión pasa por fomentar el crecimiento y el desarrollo hasta que o colapse el sistema o la naturaleza. La población mundial sigue aumentando y dicen que llegará hasta 10.000 o incluso 12.000 millones de personas, siguiendo con un consumo similar a la actual, tanto de materias como de energías, no sabemos si podrá seguir surtiendonos o todo quedará arrasado por nuestra existencia. Necesitaríamos varios planetas más para continuar con nuestro festín saqueador Por lo que deberíamos plantearnos este modelo de sobreconsumo y derroche y por lo tanto de producción. Si queremos seguir exprimiendo está gran naranja azulada tendremos que asumir las consecuencias, lo triste es que seguramente tengan que pagar los platos rotos nuestrxs hijxs y las futuras generaciones.

Todo está mecanizado y maquinizado, lxs trabajadorxs son sólo un apéndice de la maquina. La maquina determina y marca el ritmo de trabajo, asegura el control y la disciplina laboral. Las ordenes nunca dejan de existir, tan sólo se insertan despersonalizadas en el diseño científico racional del trabajo. Igualmente, el valor de trabajo social desaparece en esa relación de exclusividad que el trabajador mantiene con la maquina.2 Simples engranajes sustituibles e intercambiables, agradecidxs por su suerte de estar empleadxs; que no eligen su destino y que son obligadxs a venderse (muchxs mal pagadxs) ya que no tienen el poder ni los medios de crear y gestionar su existencia. El trabajo del sector primario funciona prácticamente por maquinas y el terciario por ordenadores, la artificialización ha copado todos los rincones que alberga el trabajo asalariado y ha ahorrado el numero y eficiencia de lxs empleadxs. La tecnología ha cooptado el sistema de producción mientras nos aísla del control y de la gestión autónoma sin jerarquía, centralización y especialización. La autonomía obrera es imposible es un sistema tan complejo y totalizador.

Volviendo al tema de la energía y del mantenimiento de nuestras cadenas fabriles seriadas, y a la catástrofe medioambiental y humanitaria que ha creado el sistema tecno-industrial, tenemos que plantearnos seriamente su existencia (ya que no es sostenible) y los limites naturales a los que estamos regidos pues sus recursos no son ilimitados. Está claro que para sobrevivir en esta sociedad por lo general hay que trabajar (aunque es algo relativo) y no estamos por la abolición del trabajo asalariado para tumbarnos a la bartola y a esperar que nos lo den todo hecho, claro que no, pues acabaríamos pereciendo por inanición. La cuestión es si ser esclavos y victimas de nuestro propio sistema productivo. Los procesos industriales contienen las estructuras técnicas de la opresión ¿como defenderlos?, ¿porqué hacerlo?, se defienden porque no tenemos nada, estamos desposeídxs por lxs dominadorxs y no podemos autogestionar nuestras vidas. Responder al porqué es más complicado, pero podríamos decir que por nuestra sensación de bienestar gracias a la abundancia de bienes materiales, por nuestro brutal hedonismo y odio al esfuerzo o por el condicionamiento y adiestramiento que hemos sido sometidxs desde que nacemos. Defender lo indefendible es de mediocres, y lo somos, pues la obediencia a la autoridad y la desinformación a la que somos sometidxs a cada instante nos anula. Lxs capitalistas y sus lacayos se han blindado inculcandonos pensamientos irrelevantes fabricados en serie, como sus productos, mediante el espectáculo televisivo y las drogas publicitarias, deshumanizandonos y haciéndonos meros autómatas del consumo-trabajo mientra ellxs se enriquecen y mantienen una vida de lujo, estatus y poder.

Si queremos mantenernos como especie en este planeta y vivir en Libertad, en condiciones saludables tanto nosotrxs como las demás especies animales y vegetales, tenemos que utilizar energías y herramientas que no deriven en un sistema de esclavitud ni de devastación ambiental; sin jerarquías ni autoridad ni dominación, buscando la armonía con la naturaleza y en nuestras relaciones. Tenemos que trabajar para nosotrxs mismxs y para todxs sin amxs ni esclavxs. No alimentemos las cadenas de la opresión sino el camino de la autogestión hacia la emancipación humana y animal.

1 Son puestos poco cualificados a tiempo parcial. Son trabajos precarios cuyo salario no llega ni a la mitad del sueldo mínimo interprofesional pues no superará la cuantía de los 400€ donde además la capacidad de progresión o el salario por antigüedad quedan en el olvido. Los miniempleos permiten cotizar para la jubilación, pero la pensión a la que pueden acceder los/as trabajadores una vez se retiren (que por ley, en el Estado alemán, es a los 67 años) es irrisoria: máximo 3,11€ de pensión al mes por cada año trabajado. Trasladado a la vida real, esto significa que una persona que haya trabajado limpiando casas o sirviendo mesas durante 45 años bajo esta modalidad, y que a la vez cotice a la Seguridad Social, tendrá al jubilarse una pensión mensual de 139,95€, según un informe del Ministerio de Trabajo alemán. Sus destinatarios: los jóvenes. Fuente: Todo por Hacer.
2Trabajo Infinito. Antonio Ohiruela. Revista Raíces numero 4

Tuercas que giran sobre tornillos que faltan



Vivimos un momento realmente jodido para los Estados, que no dudarán en exprimir a sus súbditos hasta límites insospechados con tal de salvar el culo. La gente muerta de hambre en las calles, los calabozos o las cárceles hasta los topes de pobres o la desesperación de las personas que se tragaron el cuento y ahora se suicidan prendiéndose fuego en las puertas de los bancos, les importa muy poco ante la perspectiva de salir de la quiebra. De ahí que, casualmente, en éstos momentos difíciles se refuerce la imagen de súbdito dócil y antiviolento bajo el disfraz del buen ciudadano. Concepto moderno para denominar a la servidumbre eliminando todas las connotaciones negativas que ésta palabra pueda generar.

Cifuentes hace un comentario que vincula a la Plataforma de afectados por la hipoteca (PAH) con ETA. Esto cae como una bomba sobre los medios de comunicación, todos se hacen eco de las aplastantes declaraciones. Y comienzan a ofrecer espacios dentro de sus debates o tertulias a ésta personaja para matizar el “error”. En ellas, se posiciona a favor de la legitimidad de cualquier protesta ciudadana siempre que se realice mediante vías legales y pacíficas. Afirma que los ciudadanos deberían condenar que Bildu apoyase las actuaciones de la PAH. Pero observando la trayectoria de Bildu no debería sorprendernos que apruebe las acciones de dicha plataforma, cuyas líneas de actuación están basadas en el asistencialismo y la protesta ruidosa; lejana hasta la saciedad de cualquier atisbo de una organización terrorista. Sigue Cifuentes removiendo nuestras tripas con su ridículo “discurso” afirmando que ella está de acuerdo con cualquier tipo de protesta siempre que sea pacífica. En éste momento apagué la televisión ante las irreprimibles ganas que me entraron de vomitar. La señora Cifuentes, como delegada del gobierno, tiene la ardua tarea de enviar a sus ordas de cabezahuecas antidisturbios a partirnos la cara en todas las manifestaciones que, de forma pacífica, sacan a miles de ciudadanos de sus confortables salones a las “inhóspitas” calles a protestar... hablo de todo ésto, no porque me escandalice, sino porque creo que es una estrategia sucia, pero muy propia del carácter del circo mediático del que forman parte los políticos. Las aparentes contradicciones con las que juegan no son más que una manera de hacer saltar la liebre, es otra de las caras de la represión; que, fuera del horizonte de las cárceles, la policía, o la burocracia, se cuela dentro de cada casa a través de una pantalla de televisión. No importa si estamos de acuerdo o no con sus afirmaciones, lo importante es que ya las hemos escuchado, ya está ahí. Si me planteo escribir sobre ésto, es porque creo que merece la pena ser analizado, es su juego, a través de unas palabras pueden empezar a generar conciencia, aunque suene contradictorio, consiguen criminalizar a un movimiento que, lejos de ser marginal, está ganando popularidad entre aquellos a quienes la situación se les complica y que cada día son más. De ahí que, aunque no sea realmente radical ni terrorista, sea peligroso. Y ésto, no porque pueda generar agitación social o conflicto en las calles, sino porque genera una visión real del graso error que todas esas personas que firmaron una hipoteca en su día cometieron al confiar en que todo iba a seguir igual.

Éste movimiento ciudadanista está en auge, hasta tal punto, que notas las miradas de reprobación cuando saltas los tornos del metro, tus vecinos se enteran de que vives okupando o buscas el enfrentamiento directo con la policía en sus manifestaciones; y su éxito se debe a años y años de conformismo y confianza en la democracia. La represión está también dentro de nuestras cabezas. Y ésto es la causa del auge de la moda del ciudadano-policía que denuncia cualquier acto ilegal o, incluso la que lleva a generar brigadas vecinales para increpar y acosar a cualquier persona que se meta en una casa porque no tiene otra salida si no es la puta calle, haciéndole el trabajo a la policía como está empezando a ocurrir en zonas como Parla.
Éstos movimientos son los que últimamente y por desgracia, tienen los medios y la capacidad suficiente para sacar a la calle a miles de personas a protestar exigiendo, en amor y compañía los derechos que un día, es Estado benefactor les concedió.

En nuestra opinión, éste auge ciudadanista es uno de los mayores trofeos del sistema (¿alguien ha leído “1984” de George Orwell o “Un mundo feliz” de Aldous Huxley?, os lo recomiendo), ya que ilustra los espectaculares resultados del aparato represor. A los sofisticados mecanismos de control social a nivel tecnológico se le suma la incrustación de la mentalidad policía dentro de cada cerebro. Los puntos muertos de las cámaras de video-vigilancia están ya cubiertos con los ojos de nuestros propios vecinos. La protesta dentro de los límites del sistema no es más que eso, y vista desde arriba, constituye sólo una pataleta. “eso, eso, que protestes ahí arrinconaditos, que mientras ardan sólo un par de contenedores, encuentre la excusa para echarles a los perros y justificar así el presupuesto en material antidisturbios, yo sigo firmando su ruina”. Se ha convertido en casi un refrán popular: “los medios de comunicación de masas guían las preocupaciones de la población, determinan las conversaciones en los bares y plazas, y siembran miedo, dudas, aprobación o reprobación hacia cualquier tema que se propongan”. Que los escándalos o declaraciones de cualquier rata que pertenezca a su carne de cañón nos preocupe es hacerles el juego, y estaréis pensando que qué coño hago entonces dándole vueltas a lo que ésta “tipa” pueda decir, sí, lo hago porque no estoy exenta, y porque me parece necesario que todas nos lo planteemos. Lo que vemos por televisión nos marca, se nos queda grabado en algún lugar del cerebro, y lo más peligroso, lo terminamos asumiendo como un pensamiento propio; que en una manifestación que ha llegado a su fin cientos de personas tengan que salir corriendo de la plaza porque los cabezatuercas corran a partirle la cabeza a cualquier cosa que respire y que en los telediarios del día siguiente se destaque y exageren los cuatro contenedores que ardieron fruto de la rabia y a manos de “radicales” que no tenían nada que ver con la manifestación (jajajaja) bestias anticiudadanas, es manipulación y con otra vuelta de tuerca represión. Que ofrezcan espacios a los políticos para dar contradictorias y patéticas declaraciones sobre una realidad de la a demás de resultarles ajena, les preocuparía lo más mínimo si no fuese por la repercusión que pueda tener sobre los mercados, es también manipulación, represión y un claro intento de distorsión de la realidad que sólo justifica la presencia policial exagerada en las calles. Pero lo más grave de todo es que las personas que vivan con una televisión en sus salones no comenten o rabien con éstas cosas.

Ante todo ésto, no podemos llevarnos las manos a la cabeza cuando Cospedal hace éste tipo de declaraciones, ni cuando acosan a Bukaneros, ni cuando el cabeza-tuerca de turno nos oculta su identificación. Es su naturaleza, su modus operandi, es la personalidad de la democracia, y siempre ha sido así, lo que pasa es que antes no afectaba a tanta gente; y hasta que no tengamos ésto bien claro, seguiremos perdiendo el tiempo con los escándalos y alimentando y justificando el papel de los medios de comunicación, principales culpables de la distorsión intelectual y de la falta de análisis de la población en general.

No se puede cerrar ésta reflexión ya que está abierta a los pasos que se den en las calles y a las respuestas que se reciban desde el aparato represor, sin embargo, me parece clave incidir en la idea de la necesidad de dejar de sorprendernos o frustrarnos ante sus sucias artimañas, hay que preverlas y enfrentarlas, un claro ejemplo de ésto es el video que ha rulado por internet hasta la saciedad: una chica pidiendo el número de placa a un antidisturbios, la conversación se balancea entre la exigencia mutua e insistente de una identificación, poco a poco el policía se va poniendo nervioso y al fin termina con su rodilla aplastando el cuello de la chica mientras éstas no para de gritarle que quiere ver su número de placa. Cuando ví ésto, me quedó clarísimo, ésta chica no tiene ni idea de lo que un policía puede hacer sin atender a los límites que su propio juego le impone. Ésta chica se lo cree, se cree que es una ciudadana con derechos y que por ello, puede libremente moverse molestando dentro de los límites de la legalidad, pero a ésta chica le estaban pisando la cabeza por pedir algo que creía legítimo, y ésta chica seguramente durmió esa noche en Moratalaz con su indignación y su conciencia ciudadana. Éste tipo de anécdotas han tenido fuertes consecuencias, tanto en las cabezas de nuestras vecinas como en las actuaciones llevadas a cabo para frenar la protesta, y de los ciudadanistas indignados, ha pasado, como era de prever, al acoso a bukaneros y a otros colectivos que llevaban años currando, así como a muchos centros sociales okupados en toda la península. ¿qué hacer? para nosotras la respuesta es clara.